¿Te has preguntado qué pasaría si hoy temblara? ¿estaríamos listos para actuar?

Hace dos años la tierra volvió a moverse dejando temor y ausencia, pero también nos aportó grandes lecciones de vida para todos los mexicanos y extranjeros que se sumaron a ayudar en ese momento a vecinos, amigos e incluso a desconocidos, dejando de lado todo tipo de prejuicio social y  demostrando que en momentos de adversidad podemos darnos la mano. Por horas unimos fuerzas para ayudar a los más vulnerables, a quienes habían perdido sus hogares e incluso familiares. Dicen que los sismos no pueden prevenirse pero nosotros sí podemos estar preparados. 

“Y cuando la tierra dejó de cimbrar nos desnudamos las ideas, nos quitamos los prejuicios, dejamos de pelear por el espacio público y rodamos en conjunto y en soledad, con una bici nueva, con una bici prestada, recién recuperada del abandono, eso no importó. Lo importante fue salir y ayudar, llevar, traer, trasladar y estar ahí donde nos necesitaba la nación, donde sólo un vehículo con toneladas de nobleza como es la bici puede ingresar. Mujeres, hombres ciclistas todos y sus ganas de levantar lo que por coincidencia 32 años después  de 1985 se volvió a caer” Maya en Bici

La bici nos dejó ver qué no hay límites para su bondad, así que es importante que siempre tengamos listo un equipo para poder ayudar en caso de un sismo o cualquier fenómeno natural que nos pudiera alcanzar.

Durante el sismo del 19 de septiembre de 2017, las fallas telefónicas y cortes de electricidad impedían estar bien informados y comunicados. Además las fugas de gas, el tráfico, los bloqueos, el ruido de los automóviles y otros factores, dejaron ver que la bicicleta es el medio de transporte eficiente y sobre todo silencioso. Además de ayudar a transportar rápidamente víveres y medicamentos, la disminución de ruido aportó a las labores de rescate de quienes se encontraban atrapados en los edificios que colapsaron en diferentes puntos de la Ciudad de México. 

¿Cómo prepararnos?

Tenemos que ser más estratégicos, por ello te sugiero que te equipes con algunos básicos como lámparas, kit para ponchaduras de llanta, herramienta básica, una canasta o alforjas para cargar y trasladar lo necesario, botiquín básico (gasas, cubrebocas, alcohol, vendas, curitas, merthiolate etc), agua, walkie talkies y lo que creas conveniente y útil. Además de tener todo esto en una mochila, es importante que pongas una muda de ropa adecuada para que puedas tener comodidad mientras te desplazas a ayudar por las calles. 

A continuación te dejo el Manual de voluntarios en bicicleta que realizó Areli Carreón con aportaciones de Olaf Dikinson, Gilberto Anaya y la participación de 511 ciclistas que apoyaron en la encuesta que realizó @Bicitekas , en colaboración con  @AcopioEnBic, y @GiradeDocumentalesAmbulante.  Échale un ojo para que seamos más los que sepamos como actuar ante cualquier emergencia.

Prepárate en la medida de lo posible porque, si bien nadie desea pasar momentos tan difíciles cómo esos dos 19 de septiembre, lo mejor es está preparados.

¿Tú cómo ayudaste y cómo te preparas? Cuéntame tu experiencia en los comentarios.